Los wearables se han convertido en parte integrante de nuestra vida cotidiana. Desde relojes inteligentes que miden tu frecuencia cardiaca hasta auriculares que evalúan tu nivel de estrés, la tecnología avanza cada vez más hacia la salud personal. Pero, ¿sabías que ahora algunos wearables también se centran en la audición? Piensa en aplicaciones y funciones que controlan el nivel de ruido de tu entorno, o en notificaciones que te avisan si oyes demasiado ruido con demasiada frecuencia. Esto plantea una pregunta interesante: ¿pueden los wearables como los smartwatches detectar la pérdida de audición? Y si es así, ¿hasta qué punto es realmente fiable?
En este blog, nos sumergimos en el estado de la técnica. Examinamos las funciones que ya existen, lo que dice la ciencia sobre las mediciones auditivas mediante wearables, las ventajas y limitaciones, y cómo podría ser el futuro.
¿Cómo funciona normalmente la medición de la audición?
Para entender lo que puede o no puede hacer un wearable, conviene ver primero cómo se diagnostica normalmente la pérdida de audición. Esto se hace mediante una prueba de audiometría, realizada por un audiólogo o un otorrinolaringólogo. Consiste en oír distintos tonos a través de unos auriculares a volúmenes y frecuencias crecientes y decrecientes. Así se determina qué tonos puedes percibir y cuáles no.
También hay métodos más sofisticados, como la timpanometría (para medir el funcionamiento del oído medio) o las otoemisiones acústicas (que examina si el propio oído produce sonido en respuesta). En resumen: medir la pérdida de audición suele ser un proceso bastante preciso que requiere un equipo profesional.
Por supuesto, un smartwatch no tiene una cabina insonorizada ni un equipo de medición profesional. Pero eso no significa que no pueda hacer nada.
¿Qué están haciendo ya los wearables por tu audición?
La mayoría de los smartwatches y algunos auriculares inalámbricos se centran más en la prevención que en el diagnóstico. Apple, Samsung y Garmin, por ejemplo, han incorporado funciones que:
- Medición del nivel de ruido en tu entorno: mediante micrófonos incorporados, el smartwatch registra lo alto que es el ruido a tu alrededor. Si superas los 85 decibelios durante un periodo prolongado de tiempo, recibirás una alerta.
- Seguimiento de tu comportamiento de escucha: algunos dispositivos miden el volumen de tu música o podcasts y si lo haces de forma segura. Recibes notificaciones si escuchas demasiado alto estructuralmente.
- Mostrar estadísticas sobre la salud auditiva: en apps como Apple Health, puedes comprobar a cuánto ruido has estado expuesto y si ha sido potencialmente perjudicial para tu audición.
Estas funciones sirven principalmente para evitar daños. Pero constituyen un primer paso para detectar problemas.
¿Pueden los wearables detectar realmente la pérdida de audición?
La respuesta corta: parcialmente, pero todavía no es totalmente fiable. Sin embargo, hay avances que sugieren que será más realista en el futuro.
1. Autodiagnósticos mediante apps
Hay aplicaciones que realizan una especie de prueba de audición a través de tus auriculares. Te dicen tonos y tienes que indicar si los percibes. Es similar a una prueba de audiometría, pero es menos precisa porque no estás en una cabina silenciosa y porque la calidad de los auriculares varía mucho. Aun así, estas aplicaciones pueden dar una indicación inicial de si tu audición se está deteriorando.
2. Algoritmos inteligentes
Los investigadores están trabajando en algoritmos que predicen tu estado de audición basándose en tu comportamiento auditivo, los ajustes de volumen y las respuestas al cuestionario. Por ejemplo, si estructuralmente subes el volumen de la música más de lo normal, eso podría ser una señal de que tu audición está disminuyendo.
3. Wearables con sensores avanzados
Hay experimentos con auriculares y cascos que contienen sensores especiales para medir las emisiones otoacústicas. Esto suena futurista, pero ya es posible en los laboratorios. La idea es que en el futuro puedas hacerte una prueba de audición fiable simplemente con tus auriculares.
Los beneficios de los wearables en la audición
- Accesibilidad: cualquier persona con un smartwatch o unos auriculares inalámbricos puede obtener información de bajo umbral sobre su salud auditiva. No es necesario que acudas inmediatamente a un audiólogo o a un médico.
- Concienciación: muchas personas no saben con qué frecuencia están expuestas al ruido. Una alerta de tu reloj puede ayudarte a ponerte protección auditiva antes.
- Prevención: si te advierten de los riesgos a tiempo, puedes evitar daños auditivos.
- Control en la vida cotidiana: a diferencia de una prueba puntual en el audiólogo, un wearable puede medir continuamente. Esto te da una imagen mucho más completa de tu exposición al sonido.
Las limitaciones y los riesgos
- Fiabilidad: un smartwatch no es un audiómetro médico. Los resultados son indicativos, pero no adecuados para un diagnóstico oficial.
- Influencias ambientales: hacer un test en casa en silencio es totalmente diferente a hacerlo en un salón ruidoso o en el tren.
- Diferencias en el hardware: no todos los auriculares y relojes son de la misma calidad. En consecuencia, los resultados pueden variar.
- Privacidad y datos: los datos auditivos son información médica. Cuando las empresas tecnológicas la recopilan, se plantea la cuestión de hasta qué punto esos datos son seguros y privados.
De todos modos, ¿cuándo debes acudir al audiólogo?
Incluso con el smartwatch más inteligente, una cosa sigue siendo cierta: ¿notas que entiendes peor las conversaciones, que a menudo pides que te las repitan o que experimentas acúfenos (tinnitus)? Si es así, deberías someterte siempre a una
Además, un especialista en audición también puede aconsejar inmediatamente soluciones: audífonos, dispositivos para enmascarar el tinnitus o incluso protección auditiva personalizada para evitar daños mayores.
El futuro de la medición de la audición mediante wearables
Hay muchas posibilidades de que se produzca un gran avance en los próximos años. Ya vemos cómo los wearables adquieren cada vez más funciones médicas: piensa en la monitorización cardiaca (ECG), la saturación de oxígeno e incluso la detección de la apnea del sueño. Así que tiene sentido que la audición sea el siguiente paso.
Puede que pronto tengamos auriculares que no sólo reproduzcan música, sino que también controlen continuamente tu audición. O smartwatches que, en cooperación con tapones inteligentes, puedan crear una curva auditiva precisa. Esto te permitiría hacer ajustes preventivos, incluso antes de que notes que tu audición se está deteriorando.
Y lo que es quizás más importante, cuando millones de personas recopilan sus datos auditivos, pueden aportar valiosas ideas a la ciencia. Piensa en las tendencias de la pérdida de audición en los jóvenes, o en el impacto a largo plazo del ruido urbano.
La situación actual: útil, pero aún no perfecta
¿Pueden los wearables detectar la pérdida de audición? Sí, pero sobre todo indicativo por ahora. Son excelentes para hacerte consciente del ruido y del comportamiento auditivo arriesgado. Dan señales útiles que pueden animarte a cuidar mejor tu audición. Pero para un diagnóstico fiable, sigues necesitando ver a un audiólogo o a un otorrinolaringólogo.
Aun así, el desarrollo es prometedor. Quién sabe, quizá en el futuro podamos comprobar nuestra audición tan fácilmente como nuestra frecuencia cardiaca. Hasta entonces, utiliza tu smartwatch como herramienta, pero en caso de duda, confía siempre en un profesional.
