Los audífonos son una herramienta esencial para las personas con pérdida de audición, pero los usuarios suelen preocuparse por la durabilidad de sus dispositivos, sobre todo si están expuestos al agua o al polvo. Afortunadamente, hoy en día existen en el mercado audífonos resistentes al agua y al polvo que son más resistentes a distintas condiciones ambientales. Pero, ¿cómo saber qué audífono es realmente impermeable y qué significa esto exactamente? En este blog respondemos a estas y otras preguntas sobre los audífonos resistentes al agua.
¿Qué significa realmente «impermeable»?
Los audífonos estancos están diseñados para resistir el agua hasta cierta profundidad y durante cierto tiempo. Pero el término «resistente al agua» puede causar confusión, ya que no todos los dispositivos resistentes al agua ofrecen el mismo nivel de protección. Para determinar lo resistente al agua que es un audífono, presta atención a su clasificación IP (Ingress Protection), un sistema internacional que indica lo bien que un dispositivo resiste sólidos (como el polvo) y líquidos (como el agua).
¿Cómo sabes qué audífono es resistente al agua?
La mayoría de los audífonos resistentes al agua tienen una clasificación IP68. Esto significa que son totalmente resistentes al polvo y que pueden soportar el agua hasta una cierta profundidad, normalmente 1 metro durante 30 minutos. Si un audífono tiene esta clasificación, puedes suponer razonablemente que es muy resistente a la lluvia, el sudor y la inmersión accidental en agua.
Sin embargo, ten en cuenta que «sumergible» no siempre significa que puedas nadar con él. El término indica que el aparato puede sumergirse temporalmente en el agua sin sufrir daños, pero la exposición prolongada al agua, como nadar, puede dañar los componentes electrónicos. Por tanto, comprueba siempre las especificaciones y recomendaciones del fabricante antes de exponer tu audífono al agua.
¿Cómo se prueba la impermeabilidad?
La impermeabilidad de los audífonos se comprueba según la norma IP. Los fabricantes sumergen el aparato en agua y comprueban que sigue funcionando correctamente después del tiempo especificado. Los audífonos con una clasificación IP68 deben ser capaces de resistir el polvo y la inmersión a una profundidad de un metro durante 30 minutos sin sufrir daños. Además de estas pruebas, los fabricantes suelen comprobar la resistencia de los dispositivos al sudor y otros líquidos para garantizar que siguen funcionando bien en el uso diario.
¿Qué es la densidad del polvo y por qué es importante?
La protección contra el polvo es otro factor importante en los audífonos. Un dispositivo a prueba de polvo está protegido contra la entrada de pequeñas partículas, como arena o polvo, lo que resulta especialmente útil para las personas que trabajan en entornos polvorientos o pasan mucho tiempo al aire libre. Al igual que la impermeabilidad, la protección contra el polvo se indica mediante una clasificación IP. Los audífonos que son totalmente a prueba de polvo tienen la clasificación más alta de «6» para sólidos (el primer dígito de IP68), lo que significa que no pueden entrar partículas de polvo en el aparato.
¿Ayuda la impermeabilización contra la transpiración?
Sí, los audífonos resistentes al agua también ofrecen protección contra el sudor. Como el sudor puede provocar la corrosión de los componentes electrónicos, es importante que los audífonos sean resistentes a la humedad. Un dispositivo estanco con clasificación IP68 está diseñado para resistir la transpiración, lo que significa que debes preocuparte menos por los daños causados por el sudor durante la práctica de deportes u otras actividades.
¿Los audífonos estancos son recargables o funcionan con pilas?
Los audífonos estancos están ahora disponibles tanto en variantes recargables como en modelos con pilas sustituibles. Los audífonos recargables son prácticos porque no tienen un compartimento para la pila que pueda ser vulnerable a las filtraciones de agua. Esto suele permitir que estén mejor sellados, lo que contribuye a su resistencia al agua. Los modelos con pilas recambiables deben diseñarse cuidadosamente para garantizar que el agua no tenga ninguna posibilidad de entrar en el compartimento de la pila. Esto puede afectar a la durabilidad en condiciones de humedad, dependiendo de lo bueno que sea el sellado.
¿Puedo nadar con audífonos estancos puestos?
Aunque algunos audífonos son resistentes al agua, esto no significa necesariamente que estén diseñados para nadar. Como se ha mencionado antes, una clasificación IP68 significa que el dispositivo puede permanecer bajo el agua durante un breve periodo de tiempo sin sufrir daños, pero el uso constante bajo el agua, como la natación, puede acabar causando problemas. Para las personas que aún quieren nadar y seguir utilizando sus audífonos, existen fundas protectoras especiales que ofrecen una resistencia adicional al agua.
Además, es importante recordar que, aunque el aparato sea resistente al agua, la transmisión del sonido funciona de forma diferente bajo el agua que en el aire. Bajo el agua, las ondas sonoras se mueven más deprisa, y esto puede afectar a la forma en que se percibe el sonido. Los audífonos no suelen estar diseñados para manejar este tipo de ondas sonoras, lo que significa que tu experiencia auditiva bajo el agua puede no ser óptima.
¿Qué oyes bajo el agua con los audífonos estancos?
Es importante comprender que, aunque puedas llevar tus audífonos sumergibles bajo el agua, esto no significa que vayas a oír lo mismo que por encima del agua. El sonido viaja más rápido y de forma diferente bajo el agua, lo que puede dar lugar a un sonido amortiguado o distorsionado. La mayoría de los audífonos no están diseñados para corregir estas diferencias acústicas, lo que significa que las conversaciones bajo el agua pueden ser difíciles de entender. Esta es una consideración importante si estás pensando en llevar tus audífonos contigo mientras nadas.
¿Cuándo te beneficiarás de un Audífono Antipolvo?
Un audífono a prueba de polvo es útil para las personas que trabajan en entornos donde hay mucho polvo, como obras, talleres o zonas al aire libre. Aunque no busques un entorno especialmente polvoriento, las partículas de polvo pueden entrar en el aparato y causar problemas a largo plazo. Los audífonos antipolvo están diseñados para impedir la entrada de estas partículas, lo que ayuda a proteger la electrónica interna y a prolongar la vida útil del aparato.
¿Qué tipos de protección son importantes para tu estilo de vida?
- Impermeable al sudor y la lluvia: Si haces ejercicio o trabajas habitualmente al aire libre, el sudor o la lluvia pueden dañar tu audífono. Un dispositivo resistente al agua ofrece mayor seguridad y durabilidad.
- A prueba de polvo para trabajos al aire libre y entornos polvorientos: Para las personas que trabajan a menudo al aire libre o se encuentran en entornos polvorientos, un dispositivo a prueba de polvo ofrece una protección adicional. Evita que se acumulen pequeñas partículas en los componentes electrónicos, haciendo que tu audífono dure más.
Conclusión
Los audífonos resistentes al agua y al polvo ofrecen una protección adicional que puede prolongar la vida útil de tu aparato, sobre todo si te expones regularmente a la humedad o al polvo. Al elegir un audífono resistente al agua, presta atención a la clasificación IP y considera si quieres un modelo recargable o prefieres uno con pilas reemplazables. Aunque puede que no tengas problemas con la lluvia, la ducha o el sudor mientras haces ejercicio, esto no significa que nadar sea siempre seguro con audífonos resistentes al agua.
En caso de duda, siempre es buena idea consultar con tu audioprotesista qué es lo que mejor se adapta a tu estilo de vida y a tus necesidades auditivas. De este modo, podrás elegir con conocimiento de causa y disfrutar de toda la funcionalidad que te ofrece tu audífono.